PENSAR EN INFINITO

Pienso,
y no,
no tengo nada.

Mi mente sigue en blanco,
aunque ya parece normal.

Yo solía pensar en azul,
porque era como el cielo.

Me gustaba pensar así,
así que te lo conté.

Ese pudo haber sido mi mayor error,
o tal vez mi mejor acierto.

Pues tú me dijiste que era malo,
pues el cielo no es el límite.

Claro que tú lo dijiste diferente,
contándome todo lo que pensabas.

Me llevaste a un observatorio,
y me enseñaste el telescopio.

''Ese es el cielo real,
pero no el final'', dijiste.

Es cierto que me enseñaste cual era el límite,
pero también que mis pensamientos no tenían sentido.

Ahora no estás,
y yo no soy capaz de pensar en infinito.

Solo tú conoces ese color,
solo tú puedes pensar.

Y ya sé que sobran mis comentarios,
peor igual así vuelves.

Quiero pensar que leyendo esto vendrás,
y me dirás como pensar en infinito,
y te volverás a ir.

Porque realmente así sucedió con el azul,
porqué no con el infinito?

Así que por favor, enséñame;
dime como puedo pensar en infinito.