HIJA

Soy yo,

El producto final,

De una mezcla perfecta

Entre las alas del viento

Y la sonrisa del miedo.

Soy yo,

La mezcla que jamás será nada.

Ni un sentimiento,

Ni una risa,

Ni esa mirada,

Ese momento,

Esa canción,

Esa lágrima,

Ese baile,

Esa inseguridad.

Yo tan solo seré la brisa,

Que observa.

Que pasa rápidamente por delante,

Que no vive.

Porque el viento,

Jamás seré capaz de alcanzar,

Y cualquier abanico me puede abatir.

Y sí, soy yo,

Así, conmigo,

Es como acaba

La historia del viento.

Porque de sus alas,

Nació la brisa,

Y en su sonrisa,

Es donde acaba.

Porque se quieren tanto,

Pero jamás estarán juntos.

No pueden vivir sin el otro,

Pero no pueden vivir a la vez.

En parte son como el sol y la luna,

Aunque no tengan nada que ver.

Aunque no tenga nada que ver,

Con que yo soy su producto final.

Aunque sea mentira que soy

Hija del viento,

Es verdad que soy hija de huracán.

Y las hijas de los huracanes,

Siempre pueden decidir que ser,

Brisa, o torbellino.

Sin duda alguna,

Por mucho que me tiente el viento,

Elijo ser torbellino.

Porque no hay nada que

Ame y odie más,

Que pasar desapercibida,

Tal cual una brisa.

No hay nada que

Odie y ame más,

Que acabar con todo,

Como torbellino.

Pero lo que sí sé,

Es que entre ser débil,

O fuerte;

Me quedo con ser fuerte.